El pacífico Colombiano es un territorio agreste, extenso e
inexplorado, no sé hasta qué punto sea bueno o malo, lo único cierto es que
esta especie de aislamiento es lo que ha hecho que su esencia se mantenga casi
intacta, que su cultura sea tan inmensa y variada como su extensión, que las
ballenas jorobadas vengan todos los años entre los meses de Julio y Noviembre a
aparearse y tener sus bebés en sus cálidas aguas y que por esto sea un destino
al que todo viajero debería ir.
- El punto de acceso más fácil al pacifico Colombiano es por
el departamento del Valle del Cauca, en Buenaventura, unas dos o tres horas
desde Cali ($25.000). En el puerto hay varias opciones para trasladarse hasta el punto de
encuentro con esa magia pacífica que prefiera, Juanchaco, La Bocana, Piangüita, Maguipi o
mis favoritos: Ladrilleros y La Barra. (Entre $30.000 y $70.000, depende a donde vaya).
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Comunidades sobre el mar, llegando a Ladrilleros. |
Los viajes en lancha no me gustan pero bueno, las que parten
desde el muelle de Buenaventura parecen ser más buenas y seguras que las que salen de
Taganga a
Tayrona, esas son terroríficas! Aquí no lo son tanto así que el viaje
de una hora hasta Juanchaco y de ahí en tractor hasta Ladrilleros se puede disfrutar, antes de salir de Buenaventura
debe pagar un pequeño impuesto porque desde ese punto usted ha ingresado
en una nueva área protegida de Parques Nacionales Naturales de Colombia, la
reserva natural Uramba, menos de un dólar, no se asuste.
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Playas y espesa selva pacífica. |
Ya en Ladrilleros siempre me quedé en el hotel bahía del
sol, es hermoso y sus empleados son una maravilla pero la última vez tuve un "problemita" con su dueño, es medio peste el señor así que no quiero saber más
del tema (jajaja), hay varias opciones y casi todas ofrecen las 3 comidas del
día y algunas salidas ecológicas, todo en paquete, bien cómodo y barato.
Si su plan es
mantenerse auténtico y el contacto con la gente de la región es una prioridad entonces puede
irse a la barra y quedarse en alguna posada nativa, hay muchas! Éstas disponen
la mayoría de alojamiento o espacio para acampar, aparte de ofrecerle también
la comida hecha por esas manos prodigiosas de las mujeres del pacífico, una
delicia y también muy barato!
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Playa negra de la Barra. // Gente negra de la Barra. |
Una vez instalado prepárese para ser sorprendido por las
maravillas que esta tierra exótica tiene para ofrecerle, puede pasarse el día
tirado en las playas y jugando de cabeza con sus indomables olas, irse de paseo
por los esteros o por los manglares, visitar las otras playas, sentarse en alguno de los miradores sobre
los acantilados, cerrar los ojos y sentir el poderío del mar rompiendo contra
las paredes de piedra, visite las comunidades indígenas y sus coloridas artesanías o
hágase amigo de la gente negra, no va a encontrar gente más alegre ni que baile
mejor que ellos, son increíbles!
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Gente saltando de las formaciones rocosas. |
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Niños de la comunidad Emberá Wounaan. |
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Mágicos manglares y esteros. |
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La gente negra y su sabor! |
Y lo más importante, trate de que su visita coincida con la
migración de las gigantescas ballenas jorobadas, pocas experiencias le dejarán
tan maravillado como esta de ver un animal de toneladas saltar y revolotear
frente a usted en medio del océano, un sueño! (Esta actividad puede costarle $25.000, las otras son más baratas).
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Una coqueta ballena saludando. |
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Y de despedida, un besito! |
Para terminar y si tiene más tiempo, puede pasarse también por la reserva étnica y ecológica de San Cipriano, tome el transporte urbano en Buenaventura y diríjase a la vereda Córdoba, ahí tome una "brujita" un improvisado sistema de transporte con balineras que rodando sobre los rieles del tren lo dejará en menos de una hora en medio de esta espesa y mágica selva negra, hospedarse y comer allí también es barato, anímese y déjese embrujar por la magia del pacífico Colombiano!
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Rumbo a la reserva, sobre la "brujita". |
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Alguna de las muchas pozas y cascadas que encontrará en medio de la selva. |
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